Una de las tendencias claras de este año, son las botas altas. Han llegado para liderar el podio de entre los diferentes modelos de calzado que nos podemos encontrar y es que no es para menos. Los km revistiendo nuestras piernas y alargando visualmente la figura nos han hecho adictas a un modelo que además de favorecernos, es versátil y muy fácil de llevar.

El look que os enseño hoy está formado con prendas que son un fondo de armario perfecto, una buena inversión en consecuencia y una apuesta segura como resultado.

Entremezclan atemporalidad , versatilidad, actualidad pero también con un largo recorrido previo. Son el ejemplo de que un buen diseño que ya ha conquistado el street style puede seguir teniendo un hueco en nuestros armarios a lo largo de los años.

Si analizamos cada prenda y dejando lo que para mí es el elemento principal del look para el final, tenemos como base un jersey de lana trenzado de cuello vuelto amplio que podemos utilizar perfectamente como tal o como vestido , tal y como he elegido para el conjunto de hoy. Su color y su estructura nos permitirán hacer tantas combinaciones como queramos.

Continuando, una capa en el mismo tono. Una de las prendas más elegantes de esta época del año , aunque su presencia es más bien intermitente porque sí que es cierto que su aplicación práctica no suele encajar entre todos los perfiles , la hemos podido ver en firmas como Celine y Dior que no han dudado en dar cabida a una prenda tan sofisticada como necesaria dentro del mundo de la moda.

Hoy por hoy, la podemos encontrar reconvertida y alejada de su clásico diseño para demostrar así su adaptación a los diferentes estilos y ofrecer una variedad de posibilidades. Es por eso, que no es de extrañar que la encontremos con tejidos como el tul, terciopelo o plagada de lentejuelas.
Por último, no os dejéis engañar por su patrón porque es muy abrigadita y perfecta para ser usada como prenda exterior principal o para jugar con distintas capas.

Volviendo a las botas, qué os puedo decir. Un amor a primera vista frente al que no me resistí. Su color berenjena nos da muchísima versatilidad y es , además , una de las tonalidades del momento. Su estructura y largo, consiguen que nuestras piernas ganen centímetros visualmente y estiliza nuestra figura.

Elevar nuestros looks es fácil si contamos con botas de este estilo. Tan idóneas para vestidos y faldas como para pantalones, todo vale para un calzado tan rompedor como icónico que no ha sido pensado para limitarlo.

En definitiva, creo que se trata de un look que me representa al 100% , con prendas que suponen un fondo de armario perfecto al que recurriré con asiduidad y que consigue mezclar historia pasada y actualidad a partes iguales. Un legado en la moda que permanece latente para recordarnos que aquello que funcionó en el pasado puede volver a hacerlo en el presente porque , como ya sabemos, la moda es cíclica y es una de las cosas que contribuye a su valor.

“La mujer lleva la ropa, pero son los zapatos los que llevan a la mujer”, Christian Louboutin.
