Comienzo este post asegurando que es uno de los más especiales hasta la fecha y uno de mis favoritos indiscutible. ¿El motivo ? La chaqueta protagonista del look está hecha por mi madre y no me puede gustar más.
La carga emotiva que porta, lo mucho que significa tener algo así en mi armario, el esfuerzo y la ilusión detrás de un patrón , la persona reflejada en su diseño, la exclusividad de algo que sólo llevas tú y el mimo del proceso .El lujo también está en cosas como estas.
En definitiva, un tesoro hecho prenda ( gracias siempre mamá).
De estética militar, líneas y patrones bien definidos, estamos ante una prenda que es y ha sido tendencia durante mucho tiempo y que seguro , seguirá dando de qué hablar pues es un estilo que hemos visto ocupando una posición clave en la moda contemporánea .
Los tonos tierra, verde, oliva , las telas resistentes y los detalles con mucha presencia propia, son algunos de los detalles que podemos encontrar en este tipo de prendas. Todas ellas con una presencia imponente que grandes diseñadores como Chanel, Hermés, Christian Dior o Louis Vuitton no dudaron en aprovechar al máximo .
La combinación del neutro negro y ese caqui suavizado , funciona a la perfección consiguiendo que se generen puntos de luz sobre los detalles de la chaqueta y asegurando una cohesión perfecta entre colores que potencia su versatilidad y nos abre el abanico de posibilidades en cuanto a combinaciones.
Y hablando de detalles, no podemos pasar por alto la botonadura central de gran tamaño que consigue focalizar la atención en la línea natural del cierre y hacer que visualmente se vea alargada y el cuello y los bolsillos siguiendo esa inspiración bélica al detalle.
Como os digo, nuestra prenda principal ya consigue ser protagonista por diseño propio pero si aún queremos potenciar este efecto, debemos optar por prendas básicas.
Es por eso que para la parte de arriba y actuando de segunda piel , un cuello vuelto negro liso que aunque no termina de apreciarse si que sobresale por encima del cuello . Creando así un doble fondo y un ligero volumen de la zona
Para la parte de abajo , un pantalón de traje. Un clásico infalible que supone un fondo de armario indiscutible, un ejemplo de atemporalidad y de versatilidad a partes iguales y como calzado, otra de las tendencias del momento : las bailarinas de cierre múltiple .
Estamos ante un calzado que ejemplifica a la perfección el estilo preppy. Una opción elegante, clásica y coqueta a la par que femenina que ha conquistado el street style desde el primer momento .
Por último, un bolso cuadrado que supone otro básico de armario necesario gracias al diseño y el color y que con su forma, también se diferencia de otros modelos más sencillos . Al final, contar con este tipo de accesorios supone tener un as bajo la manga frente a multitud de outfits.
Y así, lo particular se impuso. Tan único, tan personal , tan ella. Las telas tomando forma a medida, revistiendo y recorriendo, haciéndola sentir partícipe de todo ello. El mimo siendo cobijo sin esperas . La suerte llamando a la puerta en el detalle , la atemporalidad asentándose en su armario, el tiempo dejando fiel testigo de lo invertido – Ohyepblog
