Hablar de un traje en moda es hablar de un pilar fundamental para obtener un buen fondo de armario. Es hablar de una de las columnas que darán soporte a todo lo demás, de la atemporalidad hecha prenda y la versatilidad llevada de la mano. Es hablar de multitud de posibilidades en un dos piezas que lleva historia en cada hilo.

Y para los amantes de los trajes, siempre hay alguno que consigue desmarcarse de nuestra pequeña colección . Ya sea porque se entalla a la perfección , por el color , por lo favorecedor que resulta, por un patrón que va un pasito más allá o por las razones que encontremos que siempre nos acaban llevando a optar por ese en primer lugar. Pues bien , aquí tenéis el ejemplo que os digo y reafirmando lo mencionado, no es la primera vez que os lo enseño pero en esta ocasión, podéis ver otra combinación.

Este estampado va a conseguir que nuestra figura se vea visualmente alargada y estilizada . ¿Cómo podemos potenciar aún más este efecto ? con unos zapatos que comparten este mismo diseño y que unifican todo el look a golpe de vista.

«El traje es un complejo vehículo de significado, cuya forma suscita preguntas sobre la identidad
que continúan desafiándonos hoy en día», afirma Christopher Breward y no podría estar más de acuerdo con esta idea porque si hay una palabra que asocio directamente a este dos piezas es identidad.


Como curiosidad, mencionaros que la aparición del traje aceleró la era de la producción de ropa en serie porque el sastre tenía que producir sus diferentes elementos de acuerdo a un conjunto de procedimientos estandarizados y con un cuidadoso conjunto de medidas adaptables. Ese proceso hizo que la ropa fuera más barata y accesible.

Elegante, sofisticado y en definitiva, la prenda más democrática posible de nuestro armario.

Este tipo de tonalidades azules, admiten muchas combinaciones pero , sin ninguna duda, una de mis favoritas es el gris o el plateado. Por esta razón, me he decantado por complementos en este tono pues a pesar de que me encanta el juego que da la monocromía , creo que lanzar ciertos puntos de contraste y de luz siempre suma al conjunto.

Se dio cuenta de que no hay cambio sin voluntad previa , ni atisbo de esperanza sin proyección en el futuro. Jugó con las palabras que habitaban sus pensamientos sin permiso , evitando la huella de lo que sería un lastre. Se miró al espejo y se quiso. Lo repitió en alto . Tomó la buena costumbre de hablarse bien , de convertir ese traje en una carta de presentación empoderada que no daba cabida a dudas ni a repliques ni a oportunidades vacías. La primavera irrumpió en el cuarto y abrió los ojos. – ohyepblog
